02 diciembre 2007

Sumergido


Me hinque de rodillas junto al río, estaba deseoso de sumergir mi cabeza bajo el agua y separar mis sentidos de cualquier distracción, separar mi alma de mi cuerpo.
Pensé en quedarme en esa posición por el resto de mi vida, pero como es obvio no podía, sin aire no se puede vivir, como tampoco se puede vivir sin problemas.